He seguido teniendo ese presentimiento todo Yule, el que comentaba hace tiempo sobre el Dr. Eleder. Así que ayer me acerqué a la Biblioteca de nuestra Insigne Universidad. Quizás encontraria algo al respecto.
Cosa curiosa, me encontré con Rosita DosFlores, una hobbit de buena familia que está en la Escuela de Estudios Hobbiticos (mas comúnmente llamado Hobbitologia). Me comentó que había visto recientemente a la Becaria Eledhwen buscando libros en la sección de Elfología... que curioso... lo más curioso es que Rosita se acordara de ello, pero me aclaró que lo recordaba porque pocos se pasan por esa sección, pero claro, todos saben que Elden siempre esta buscando sus raices feanorianas (todo esto me lo comento la hobbit en tono confidencial).
¡Elden! ¡Ese JJNN! Quizás ahí estaba el quit de la cuestión. Agradeciendo la información a Rosita me acerqué a la sección dedicada a los Elfos, la mayoria de los volúmenes parecía que llevaban años, no, siglos sin tocarse, una gruesa capa de polvo los cubría (¿no hay gente que limpia la biblioteca?), revisé las múltiples estanterias. No parecía haber nada fuera de lo normal. Aunque... al llegar al último pasillo, el más recóndito, oscuro y polvoriento pasillo, vi en el suelo claramente pisadas de pies. No soy experta en huellas, pero parecía que habian de diferentes personas (o elfos, o lo que fuera).
Revisé los últimos libros, un par de ellos no tenían esa capa de polvo la cual parecía formar parte de esa zona de la biblioteca. Curioso.
Cogí los dos con mucho cuidado y cubriendolos con mi capa me dirigí al mi despacho. No quería poner en aviso a nadie de ese detalle.
Cerré la puerta de mi despacho. Eché las cortinas. Y solo entonces saqué los dos libros de debajo de mi capa.
Los contemplé asombrada, eran las primeras ediciones (para algo sirve ser catedrática de frikismo) del juego de rol "Saga Realidad". ¿Para que querrían consultar estos gruesos y aburridos volúmenes si actualmente todo el mundo (excepto los profesores, claro esta) jugaba con su palantir?
Este dato me ha dado mucho que pensar....
19 de enero de 2005
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